La proctología o coloproctología es una subespecialidad de cirugía general y del aparato digestivo que se ocupa del diagnóstico y tratamiento, sea quirúrgico o no, de las enfermedades que afectan al ano, el recto y el colon: hemorroides, fisura y fístula anal, abcesos rectales, estreñimiento, colitis ulcerosa, condilomas, incontinencia fecal, prolapso de recto, divertículos de colon, etc . El Dr Hernán Guzmán Céspedes, proctólogo realiza en Clínica Ginestética exámenes como colonospopias, rectoscopias, manometría anal, entre otras.

PLICOMAS ANALES: EXTIRPACIÓN CON LÁSER

En las mujeres que han tenido embarazos es muy frecuente haber presentado hemorroides, los que la mayoría de las veces remiten espontáneamente. Pero, en ocasiones la piel que envolvía el hemorroide queda sobrante dejando una especie de colgajo anal llamado plicoma. El Dr. Hernán Céspedes y el equipo médico de la clínica realiza la extirpación de este molesto exceso de piel, con una cirugía láser ambulatoria.

TROMBOSIS HEMORROIDAL

Las hemorroides son almohadillas de vasos sanguíneos (venas y arteriolas) de la submucosa del conducto anal, sostenidos por músculo liso y tejido conectivo. Estas formaciones están presentes y son normales durante el desarrollo, pero cuando se debilita el tejido de sostén o por aumento de la presión de los vasos, se transforman en masas vasculares que se deslizan y protruyen por el ano dando origen a distintos síntomas. Existe un plexo hemorroidal interno y otro externo, que se comunican.

La trombosis hemorroides consiste en la aparición brusca de una masa indurada, dolorosa, en el margen del ano, de color violáceo, de diferentes tamaños desde 0,5 cm. a 2 o más cm.   Se debe a la presencia de sangre coagulada y se puede formar luego de episodios de constipación o diarrea, después de realizar esfuerzos físicos o por alteración de las paredes de los vasos.

El dolor alcanza su máxima intensidad a las 48hs. y luego puede disminuir. Si se deja sin tratamiento pueden ocurrir dos cosas:El trombo se retrae lentamente y mejora luego de varias semanas. Queda siempre una induración residual.La piel tensa de la hemorroides trombosada, se necrosa y sangra, con evacuación incompleta.

¿Cómo se trata? Si el dolor es muy intenso, en los primeros días, con una gran masa trombosada, se puede realizar el drenaje quirúrgico, aliviando rápidamente el dolor.La cirugía definitiva de sus hemorroides se programará cuando no exista complicaciones.

GRANULOMAS - ABSCESOS ANALES

El absceso anal es una patología infecciosa perianal. Las causas más comunes son las infecciones de las glándulas anales, también pueden originarse en el marco de fisura anales, hemorroides complicadas y otras patologías del conducto anal.Aparecen en cualquier época de la vida, pero es más común en los adultos.
El paciente se presenta con dolor anal y perianal, espontáneo, pulsátil, continuo y muy intenso que aumenta al sentarse o al ir al baño. Se acompaña de fiebre y escalofríos.

El examen físico demuestra tumefacción inflamatoria perianal, eritematosa, dolorosa a la palpación, dura o fluctuante. Otras veces, observamos secreción purulenta en el ano si el absceso está drenado por el orificio interno, ubicado en el conducto anal.

El tratamiento debe ser precoz, evitando la progresión de la enfermedad. Consiste en el drenaje quirúrgico del absceso, la destrabeculación y el lavado de la cavidad. Se harán cultivos con antibiograma de la secreción purulenta aspirada y se indicarán los antibióticos correspondientes.

Una vez drenado el absceso y con evolución favorable, quedará constituida una fístula perianal que requerirá una cirugía entre los 2 a 3 meses después del drenaje quirúrgico del absceso.

Esta patología siempre debe ser asistida por un especialista en coloproctología.

CONDILOMAS ANALES

Los condilomas anales son una infección de la zona perianal e intraanal que se manifiestan como pequeñas verrugas, pero si no se tratan,  pueden crecer de forma considerable. Son causadas por el virus del papiloma humano (VPH), que se considera una enfermedad de transmisión sexual. Se presentan como pequeñas lesiones verrucosas, de color rosado o blanquecino, asimétricas. Generalmente no producen molestias, y si las hay, son mínimas como prurito, pequeño sangrado que mancha el papel o sensación de cuerpo extraño en el ano.

Se deben tratar en todos los casos, ya que si son pequeños, crecen convirtiéndose en lesiones de gran tamaño, mas difíciles de manejar; además, condilomas de años de evolución pueden convertirse en un cáncer (carcinoma escamoso).

Si además el paciente presenta infección por el virus de inmunodeficiencia humana (VIH), el riesgo de transformación en carcinoma escamoso es mucho mayor que en la población general.
Los condilomas de pequeño tamaño en la piel anal se pueden tratar médicamente con crioterapia con nitrógeno líquido.
Los condilomas de gran tamaño en la piel perianal o dentro del canal anal deben tratarse quirúrgicamente: resección, electrocoagulación o láser.

VERRUGAS ANALES

Verrugas anales (Condiloma Acuminado) son causadas por el virus del papiloma humano (VPH), la más común enfermedad de transmisión sexual (ETS). Las verrugas afectan al zona alrededor y dentro del ano, pero también se pueden desarrollar en la piel del área genital. Aparecen primero como manchas o crecimientos pequeños. Pueden llegar a ser muy grandes y cubrir toda la zona anal.
Las verrugas generalmente no causan dolor. El síntoma principal es la presencia de pequeños nódulos húmedos cerca o dentro del ano que son de color café claro o de color carne.

Si las verrugas no se eliminan, pueden crecer y multiplicarse. El virus HPV es también la causa del cáncer de ano. Las verrugas anales internas no suelen responder a los medicamentos tópicos, por lo que pueden requerir cirugía.

Las opciones de tratamiento incluyen:

Congelación de las verrugas mediante nitrógeno líquido o medicamentos tópicos que queman las verrugas.

Cirugía: Cuando las verrugas son demasiado grandes para los tratamientos mencionados anteriormente, o son internas, puede ser necesaria la cirugía. Durante la cirugía, éstas se extirpan quirúrgicamente con el paciente bajo anestesia. El tipo de anestesia depende del número y la ubicación exacta de las verrugas a extirpar.