Los ginecólogos capacitados en cirugía ginecológica mínimamente invasiva evalúan y tratan una amplia variedad de trastornos ginecológicos como dolor pélvico, endometriosis y problemas asociados al útero. Las técnicas utilizadas buscan evitar incisiones y un tiempo de recuperación más breve como la cirugía histeroscópica y laparoscopía.

HISTERECTOMÍA

En Chile, después de la cesárea, la operación que con más frecuencia se realizan las mujeres es la histerectomía o extirpación del útero.

La principal causa de la histerectomía son los miomas uterinos: estos son tumores benignos del útero que pueden provocar sangramientos anormales, dolor y si son muy grandes, compresión de órganos vecinos como vejiga o recto.

Otras causas son sangramientos uterinos persistentes, patologías malignas o premalignas del cuello uterino o endometrio (capa interna del útero) y una de las más importantes el prolapso genital. En esos casos el útero está tan descendido que incluso puede salir de la vagina y producir dolor, irritación constante y obstáculo para las relaciones sexuales.

Si se debe realizar la histerectomía hay que decidir la vía por la cual se hará esta cirugía.

Las alternativas quirúrgicas son:

  • Histerectomía Abdominal
  • Histerectomía Abdominal con Mini Laparotomía
  • Histerectomía Vaginal
  • Histerectomía Laparoscópica Total
  • Histerectomía Laparoscópica Asistida
  • Histerectomía Supracervical Laparoscópica con Morcelación Uterina
Ginestética: cirugía ginecológica, laparoscopía, histerectomía.

Histerectomía abdominal

La histerectomía abdominal es la más común y la que más se realiza en Chile y el mundo. Consiste en extirpar el útero a través de la pared abdominal mediante una insición transversal (como una cesárea) o longitudinal (del pubis al ombligo).Cabe señalar que esta última debiera ser reservada en la actualidad casi exclusivamente para casos oncológicos( cáncer).
Este tipo de histerectomía no forma parte de lo que en la actualidad llamamos cirugía mínimamente invasiva ya que requiere de unos 3 a 4 días de hospitalización y es relativamente dolorosa en su post operatorio. Nosotros, en clínica Ginestética, salvo excepciones, no usamos esta vía para realizar la histerectomía.

Histerectomía abdominal con mini laparotomía

La histerectomía por minilaparotomía, usa un separador especial para llegar al útero por la vía abdominal, tiene una buena recuperación, pero igualmente implica una intervención mayor como una laparotomía (abrir la pared abdominal). Nosotros la reservamos preferentemente para extirpar miomas uterinos cuando se desea preservar la fertilidad y queremos realizar una cuidadosa sutura de útero.

Histerectomía vaginal

La Histerectomía Vaginal se realiza por vía vaginal y es la que tiene mejor recuperación. Es una extraordinaria manera de extirpar el útero y es la vía preferente en muchos centros europeos. Requiere de experiencia en cirugía vaginal y uroginecología ya que, con frecuencia, debe realizarse en concomitancia con reparación del suelo pélvico (corrección de prolapsos e incontinencia urinaria). En nuestra clínica, representa, al menos la mitad de nuestras histerectomías. Lo más llamativo es su recuperación ya que la paciente se encuentra prácticamente asintomática al día siguiente y a las 48 horas ya está en su casa.

Histerectomía Laparoscópica

Las otras histerectomías consisten en utilizar un laparoscopio, un tubo con una cámara que a través del ombligo visualiza el abdomen e inyecta gas para mantenerlo distendido. Se agregan dos pequeñas punciones abdominales bajas de 5 mm cada una, por las cuales se introducen los instrumentos. Estos son coaguladores, pinzas y tijeras.

En nuestra experiencia la técnica mas utilizada es la histerectomía supracervical laparoscópica en que el útero se separa de sus sostenes mediante coagulación y corte, hasta dejarlo totalmente suelto en la cavidad abdominal. En ese momento se extrae morcelándolo, es decir moliéndolo y retirándolo por partes a través de una mínima insición abdominal ( 1,5 cm). Esta técnica nos ha dado excelentes resultados y su post-operatorio es comparable al de una histerectomía vaginal.

Hay que recalcar que para elegir esta técnica es fundamental que el cuello uterino se encuentre sano y que no existan antecedentes de neoplasias premalignas tratadas y la paciente debe continuar haciéndose sus exámenes anuales de Papanicolau.

Las mujeres a las cuales se les realiza la histerectomía dejarán de menstruar, pero si sus ovarios no son removidos, no debieran presentar signos de insuficiencia hormonal. La sexualidad después de esta operación no debiera verse alterada, es más debiera mejorar.

LAPAROSCOPÍA

La laparoscopía es la visión de la cavidad pélvica-abdominal mediante un tubo (óptica) que contiene un sistema de lentes. Este se conecta a una fibra óptica que transmite la luz generada de una fuente externa, para iluminar la cavidad. Usualmente se asocia una cámara a la óptica para transmitir la imagen a un monitor.

La paciente debe estar con anestesia general, recostada sobre la mesa quirúrgica. Luego, por un delgado tubo a través del ombligo, se infla la cavidad abdominal con gas (CO2). Una vez que esto se ha logrado, se introducen pequeños trocares (tubos) a través de diferentes puntos de la pared abdominal. Estos tienen diámetros entre 5 y 10 mm y permiten la introducción del laparoscopio (cámara), por el ombligo e instrumental quirúrgico ( pinzas , tijeras, coaguladores etc) especialmente diseñados para tal efecto. El cirujano está constantemente viendo la imagen de la cirugía por un monitor.

ilustracion cirugia laparoscopica

Las operaciones que se hacen por endoscopía son similares a las realizadas por técnicas tradicionales o abiertas (Laparotomía).Sin embargo, la vía endoscópica da claras ventajas y beneficios:

  • Menor tiempo de hospitalización (promedio 24 hrs).

  • Menor dolor post-operatorio.

  • Reintegro laboral más precoz.
  • Menor tiempo de convalecencia.

  • Mínimo daño quirúrgico de la pared abdominal.
  • Excelente resultado estético.

  • Menor pérdida sanguínea.

Se pueden efectuar todo tipo de operaciones ginecológicas por esta vía. Pero la evaluación preoperatoria dirá si la paciente es adecuada para un procedimiento endoscópico los que pueden ser de menor complejidad como la laparoscopía diagnóstica; mediana complejidad como quistectomía ovárica o embarazo ectópico, alta complejidad como histerectomía y máxima complejidad como la extirpación de ganglios del área, en ciertos casos de cánceres ginecológicos (linfadenectomía aorto-pélvica) o tratamiento de la endometriosis profunda ( del tabique recto vaginal).

Las laparoscopías de menor y mediana complejidad, en general, se han transformado en el estandar de oro ( goldstandar) del tratamiento quirúrgico. Se describen dos tipos de laparoscopía según la acción que se realice:

Laparoscopia Diagnóstica

Es la cirugía que tiene por objetivo el visualizar la cavidad abdominal con la menor invasión posible para hacer un diagnóstico. Es altamente utilizada en casos de:

  • Dolor abdominal agudo en estudio.
  • Dolor pelviano crónico.

  • Sospecha de endometriosis.

  • Infertilidad.


Laparoscopia Quirúrgica

Como su nombre lo indica es cuando a una laparoscopia diagnóstica se asocian otras punciones por donde pasan instrumentos quirúrgicos y se realizará una intervención. Sus ejemplos más frecuentes son ( de simple a complejo).

  • Esterilización tubaria laparoscópica.
  • Embarazo ectópico.

  • Extirpación de quistes, trompas, ovarios (anesectomías parciales y/o totales).

  • Miomectomía (extirpación de miomas).

  • Tratamiento de la endometriosis (simple a compleja).

  • Histerectomía (extirpación del útero).

  • Corrección de prolapsos.

  • Etapificación quirúrgica oncológica (extirpación de ganglios).